La tensa relación de Meghan Markle con los integrantes de la familia real británica ha sido impedimento para que esté presente en momentos de gran trascendencia, como ahora es el caso del crítico estado de salud de su suegro, el rey Carlos III.
Y es que luego de que se diera a conocer que el monarca fue diagnosticado con cáncer, el motivo fue suficiente para que Harry tomara un vuelo para estar junto a su padre. A pesar de que no se han revelado mayores detalles de la salud del rey, la preocupación de la corona es evidente.
En este contexto sorprendió que Harry viajara solo y que Meghan se haya quedado con sus hijos en Estados Unidos. Aunque dicen las ‘malas lenguas’ que esto no es más que un pretexto para que Markle no acuda a ver a su suegro.
También se especula que la única razón que Meghan Markle tendría para pisar Buckingham es darle el último adiós al papá de Harry y William. Aunque eso sí, esto podría desencadenar un pleito en su matrimonio.