Lo que prometió que nunca haría tuvo que suceder, la Reina Margarita II de Dinamarca abdicó al trono y cedió el lugar a su hijo, el ahora Rey Federico X, y así fue el tan esperado, emotivo y polémico momento de la tan esperada Coronación.
Como bien ya se había anunciado, el 15 de enero se hizo oficial la renuncia de Margarita II, un momento que quedó para la historia y en donde se le vio muy emotiva mientras firmaba su declaración en presencia de su hijo y su nieto, el Príncipe Christian, el cual no pudo dejar de ver cómo entre lágrimas su abuela partió de la sala, no sin antes decir: "Larga vida al Rey", para así con una fuerte imagen, la cual se hizo viral, reforzar la idea de su salida para darle paso a su legado.
Y así fue como el ahora Rey Federico X comenzó su reinado, a sus 55 años, después de firmar ante miembros del gobierno su aceptación al trono real, salió al balcón de Christiansborg para saludar a su pueblo que emocionado no dejó de aplaudir su llegada.
Momentos después su esposa, la ahora Reina Consorte Mary, se unió a él, así como sus hijos Christian, aclamado y muy popular entre los jóvenes daneses, Isabella, y los mellizos: Vincent y Josephine, mismos que emocionados saludaron a todos los presentes.
Aunque por un momento se pensó que todo sería formal y bajo los estrictos protocolos reales, y sobre todo en plena polémica de las supuestas infidelidades del ahora Rey de Dinamarca, al final del encuentro en el balcón y ya sin sus hijos presentes, los royals protagonizaron un tremendo beso.
Como un sello para terminar con los rumores y ante el pedimento del público que gritaba esto, el Rey Federico X y la Reina Mary unieron sus labios y como cuento de hadas regalaron la postal que todos querían.
Finalmente con esto despejan la idea de un posible divorcio, que aseguran, fue la supuesta razón para que la Reina Margarita II adelantara su retiro. ¡Ufff!