La belleza es algo que siempre ha estado presente en la realeza, muchas son las opciones a las que recurren para siempre lucir impecables y saludables, incluso con ciertos ingredientes de cocina que jamás imaginarías como ¿el vinagre de manzana?
Pues sí, aunque no lo creas este famoso líquido que es parte de la gastronomía de muchos países, es también un ingrediente secreto en las dietas de los royals, pues sus beneficios son muchos.
Y es que recientemente fue la actriz e influencer neerlandesa Nienke Pelas, quien reveló que la icónica Reina Consorte Máxima de Holanda es una gran fan de utilizarlo, ya que toma una cucharada por la mañanas y en ayunas para depurar su cuerpo, pero también por beneficios en su piel que la hacen lucir ¡fabulosa!
Se dijo que la esposa del Rey Guillermo de Países Bajos heredó este saber de su madre, misma a la que le fue heredado el "secreto" por sus antepasados reales, pero ¿es verdad?
Pues según los especialistas esto tiene mucho de cierto, ya que el vinagre de manzana, obtenido de la fermentación de azúcares presentes en esta fruta, es benéfico en...
- La salud digestiva: contribuye a tener una mejor digestión al disminuir gases, espasmos y hasta el estreñimiento. Sus enzimas destruyen bacterias patógenas que ayudan a regular los ácidos estomacales.
- La reducción del colesterol: esto implica en reducir las enfermedades cardíacas; incluso según estudios recientes se sabe que también ayuda a mejorar la presión arterial.
- Depurar el organismo: sus propiedades diuréticas reducen la retención de líquidos y gracias a que es rico en sustancias alcalinas, mejora también la circulación de la sangre al liberarla de toxinas.
- La apariencia de la piel: al depurar el organismo se ve reflejado el cambio incluso en la apariencia de la piel con más brillo, luce sana y radiante, algo que muchas celebrities aseguran haber comprobado.
Así que ya sabes, si quieres lucir como toda una royal es momento de utilizar el vinagre de manzana como parte de tu dieta, o como la Reina Máxima lo hace, un poco en ayunas. ¿Qué tal?