Los problemas en la familia real británica no cesan y es que luego de que el príncipe Harry y su esposa Meghan Markle renunciaran a la realeza para mudarse a Estados Unidos, la pareja enfrenta un nuevo reto en el continente americano.
Resulta que Harry y Meghan ya pusieron a la venta su casa de Montecito, California y de acuerdo a la información de “Mirror”, el principal motivo es la mala relación que tienen con sus vecinos.
Los duques de Sussex se “adueñaron” del acceso a un club privado en donde citan a los paparazzi para que les haga fotos. Esto ha molestado a los asistentes que desean privacidad.
Otro motivo que los obluga a mudarse es el optimismo de Meghan por retomar su carrera de actriz tanto en cine como en televisión. Su próximo hogar será Malibú, donde tendrán como vecinos a celebridades de la talla de Lady Gaga, Leonardo DiCaprio, Miley Cyrus y Charlize Theron.
La mansión que habitan por el momento tendrá un precio de salida de 12 millones de euros, aunque si no logran venderla, se quedarán con ella como segundo hogar.