Con el rompimiento de las relaciones entre algunos miembros de la familia real británica, los reflectores están al tanto de las actividades de la corona, sobre todo de Meghan Markle y Harry, que son considerados “ovejas negras”.
Conscientes de que su privacidad es casi nula, el príncipe Harry y su pareja ya no se preocupan por los paparazzi y han decidido seguir con su vida, tan es así que se tomaron unos días de vacaciones junto a sus hijos Archie y Lillibet.
La familia viajó a Costa Rica para disfrutar de sus manjares naturales en la zonas de Zapotal, Nandayure y Guanacaste.
“CR Hoy”, reconocido medio de Costa Rica, publicó una serie de fotografías de los Duques de Sussex compartiendo tiempo con sus hijos. Cabe mencionar, que no se hospedaron en un hotel, sino en una casa para tener mayor privacidad.
La feliz familia disfrutó de un par de días de descanso antes de la noche de Navidad, pues de acuerdo a los reportes, Harry y compañía aterrizaron en Costa Rica el pasado 14 de diciembre.
Durante su estancia, Meghan Markle lució radiante en todo momento, presumiendo outfits frescos y cómodos para soportar las altas temperaturas. Su buen gusto en la moda también es notable en sus hijos.