Se acerca el Día del amor y la amistad, pretexto perfecto para evaluarte cómo eres con tus relaciones. Y es que en una era donde el mundo digital parece dominar nuestras vidas, el aspecto emocional ha quedado relegado.
Las conexiones emocionales van a la baja y quizás sea culpa del Síndrome de Houdini, un mal que, sin saberlo, podrías tener. A grandes rasgos se trata de la imposibilidad de establecer relaciones afectivas duraderas, no sólo en el ámbito romántico.
En un artículo publicado en ‘Gaceta UNAM’, Ricardo Trujillo Correa, de la Facultad de Psicología de la Universidad, señala:
“En todo caso nos encontramos con la psicopatologización de la vida cotidiana. Ésta es una forma de no responsabilizarte de la vida propia. Creo que la reflexión sobre este problema asociado a los vínculos afectivos, que no es un padecimiento mental, debe ser desde la ética y la sociedad, que es la que se encuentra enferma”.
Una práctica común de este síndrome es el famoso “Ghosting”, una práctica que se ha acentuado con el auge de las redes sociales y que consiste en simplemente desaparecer intencionalmente de un momento a otro de la vida de una persona.
Otro síntoma de esta patología es el narcicismo, también conocido como un exceso de amor propio y una gran necesidad de ser admirado. Esto es un enorme impedimento para entablar un lazo emocional con alguien más. Una persona con esta característica es incapaz de compartir la atención.