Diciembre es sinónimo de bajas temperaturas, cobijas, chamarras, suéteres, chocolate caliente, café con pan y sobre todo Navidad, pero antes de esta festividad tan hermosa, experimentamos antojos de media tarde o quizá en la noche que son difíciles de resistir.
En esta temporada el frío está a todo lo que da , por lo que el organismo, como mecanismo de defensa, pide alimentos altos en calorías, los cuales suelen ser un poco más grasos tal como el chocolate o algunos pasteles, es por eso que “estamos de antojo” durante esta época del año.
No es malo ser antojadizos, lo que sí podría considerarse adverso, es no cuidar nuestra alimentación, es por eso que muchas personas suben de peso en la época decembrina, y no necesariamente por los múltiples compromisos de esta temporada navideña.
De acuerdo con Ingrid Marchant, nutricionista de la Clínica RedSalud Rancagua, “Cuando bajan las temperaturas, a modo de compensación, el organismo busca nivelar la temperatura corporal; y una manera de hacerlo es a través de una alimentación más cálida”.
El secreto para no ver comprometido tu peso y tu figura es saber combinar los alimentos más calóricos y consumir aquellos que están de temporada.
Si queremos hacer un delicioso bizcocho con chocolate podemos “cambiar ciertos ingredientes al momento de prepararlos: usar harina integral en lugar de harina blanca o cambiar la manteca de origen animal por aceite vegetal”, asegura la especialista.
Asimismo, las bebidas calientes están en nuestros deseos en todo momento. Se recomienda el consumo de tés siempre y cuando se tomen de 45 a 60 minutos después de las comidas para no interponerse con la absorción del hierro de los alimentos. Si quieres endulzarlo, puedes optar por sustitutos de azúcar.
Esta temporada es ideal para comer más que nunca frutas cítricas como toronja, naranja y mandarinas así como vegetales altos en calcio como las acelgas y espinacas.
Otra opción saludable para el frío en cuanto a alimentos salados, es la combinación de las legumbres que son frijoles,alubias, habas o lentejas con algún carbohidrato ya sea arroz o quinoa. Su valor nutricional aumenta si añades alguna verdura y con el resultado final ya sea en forma de ensalada o sopa vas a satisfacer tu antojo durante el invierno de manera balanceada.