Cuando hablamos de bloqueador solar es muy probable que de inmediato pienses en días de verano en los que las temperaturas son elevadas, pero tienes que saber que cuando el cielo está nublado también es necesario que apliques este producto. A continuación te explicamos la razón.
Un mito común que las personas creen es que en días nublados no es necesario utilizar bloqueador solar; sin embargo, no aplicar un protector sobre la piel es un gran error, pues los rayos UV traspasan las nubes, lo cual desencadena un efecto espejo que puede afectar la piel.
Aunque no puedas ver ni sentir la intensidad del sol en un día nublado, los rayos ultravioleta (UV) del sol sí pueden atravesar las nubes y alcanzar tu piel. Los rayos UV pueden causar daño, así que aunque veas el cielo nublado puedes tener consecuencias como quemaduras solares, envejecimiento prematuro y aumentar el riesgo de cáncer de piel.
Se sabe que el sol puede dañar la piel en sólo 15 minutos, por lo que no es recomendable que te expongas sin un protector, incluso cuando pienses que las nubes te protegen, si no aplicas un bloqueador las posibilidades de que te aparezcan arrugas, manchas de la edad y a largo plazo cáncer son altas.
En resumen, el uso de bloqueador solar en días nublados es una medida importante para proteger tu piel contra los efectos nocivos de la radiación UV. Se recomienda aplicar protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (FPS) adecuado, incluso en días nublados, y reaplicarlo según las indicaciones del producto para mantener tu piel saludable y protegida.
¿Qué protector solar usar?
Elige un bloqueador solar con un SPF adecuado para tu tipo de piel y la intensidad de la exposición solar. Un SPF 30 o superior se recomienda para la mayoría de las personas. Si tienes piel muy clara o eres propenso/a a quemarte, considera un SPF más alto.
Si tienes piel seca, puedes optar por un bloqueador solar con ingredientes hidratantes como la glicerina o el ácido hialurónico. Si tienes piel grasa o propensa al acné, busca productos etiquetados como "oil-free" o "no comedogénico".