Es normal que para iniciar nuestro día y antes de salir de casa tomemos una ducha, sin embargo y aunque pareciera contradictorio, bañarnos diariamente puede ser contraproducente.
De acuerdo a expertos de la Universidad de Harvard, ducharse diariamente no es bueno para nuestra salud, ya que puede provocar irritaciones en la piel, al igual que asearse poco.
¿Pero cuánto es poco o mucho? Lo ideal es tomar cuatro duchas a la semana y según Harvard, la media ideal para un regaderazo es de ocho minutos, aunque si puedes disminuir el tiempo a 3 o 4 sería perfecto.
Si bien el agua y jabón combaten las bacterias y microorganismos nocivos, su excesivo uso puede detonar picor, infecciones o reacciones alérgicas en la piel. De hecho bañarnos con frecuencia elimina el ph natural de la piel que nos protege de baterías infecciosas.
Además de cuidar tu piel, el disminuir la cantidad de duchas a la semana es una inteligente manera de ahorrar agua, al igual que mantener cerrada la llave mientras te enjabonas o el uso de productos ecológicos que permiten reciclar el agua sobrante del baño.