Charrière, reconocida por su trabajo con marcas de renombre como Chloé y Mango, diseñó una línea de ropa interior y prendas básicas para Stripe & Stare, promocionada como sostenible y compostable. Sin embargo, la influencer se sorprendió al notar similitudes sorprendentes entre su trabajo y la colección de Skims.
Aunque ni Kim Kardashian ni Skims respondieron públicamente a las acusaciones de Charrière, la controversia provocó debate en las redes sociales. Algunos usuarios defendieron a Skims, argumentando que la idea de una camiseta floral para bebé no es exclusiva de Charrière, mientras que otros expresaron su apoyo a la versión de Stripe & Stare.
Charrière, por su parte, explicó que su intención al destacar las similitudes era resaltar cómo Skims no reflejaba el enfoque sostenible de su colección. Stripe & Stare, certificada como B-Corp, se compromete con prácticas de moda sostenible, mientras que Skims fue criticada en el Informe de Responsabilidad de la Moda 2024 por su falta de transparencia y responsabilidad ambiental.
En medio de la controversia, Charrière enfatizó que no busca cancelar a nadie, pero espera que marcas como Skims utilicen sus recursos para operar de manera ética y responsable.