Fofo Márquez pasó de ser el centro de atención por su extravagancia y humor ácido a estar bajo los focos de la cruda realidad tras ser detenido por las autoridades del Estado de México tras haber agredido físicamente a una mujer en el estacionamiento de un shopping. Este hecho llevó a que Márquez enfrente cargos por feminicidio en grado de tentativa, manteniéndose tras las rejas mientras se desarrolla el proceso judicial.
Al tratarse de un influencer, rápidamente la noticia recorrió las redes sociales y provocó diferentes reacciones. Entre ellas, comentarios irónicos solicitando un "room tour" de su celda, en referencia a sus habituales recorridos por sus propiedades lujosas, como solía hacer en los vídeos que subía a TikTok.
Sin embargo, desde siempre que el influencer fue objeto de críticas por la aparente discrepancia entre su estilo de vida digital y la realidad de su situación. Usuarios de redes sociales señalaron que, si bien Márquez se presentaba como un millonario, las imágenes de su "habitación personal" sugerían todo lo contrario, siendo catalogada más como un "estudio cualquiera".
Fofo Márquez, de ser un icono del glamour digital, pasó a enfrentar las consecuencias de sus actos en un espacio cruel y de castigo como lo es la cárcel.