Pese a que se separaron hace cuatro meses, Andrea Legarreta y Erik Rubín han sabido manejar su ruptura lejos de las peleas, el escándalo y desacuerdos, incluso aún viven en la misma casa que comparten con sus dos hijas Nina y Mía.
La ex pareja, quienes llevaban 22 años de casados aún no firma el divorcio, por lo que han mantenido encendida esa velita que dé pie a una reconciliación en un corto plazo, además de que ninguno de los dos se ha cerrado públicamente la puerta a dicha posibilidad.
Por su parte, la conductora de “Hoy” habló sobre cómo han sido estos meses que ya no es la compañera sentimental de su ex esposo, con quien incluso se ha ido de viaje al lado de sus pequeñas.
“No sabemos qué nos depara el tiempo, de pronto podemos continuar como amigos, como familia, como compañeros de vida deseándole lo mejor al otro”, dijo.
No cabe duda que la también actriz y el músico dejarán que las cosas fluyan y pondrán en manos del tiempo su destino ya sea para estar juntos de nuevo o ser unos grandes amigos y ex esposos tal como lo hacen Lucero y Mijares.
“No sabemos, el tiempo dirá. Por lo menos se siente bien no estar en guerra con alguien a quien has amado tanto”, remató Andrea Legarreta y una vez más dejó abierta la posibilidad de reconciliarse con el padre de sus hijas.