El peligro de internet es que la información está al alcance de cualquiera, sobre todo con las cosas que se vuelven tendencia, por ejemplo las dietas, y el caso de Claire Richmond es uno más que se suma a las historias que pudieron terminar en tragedia.
Y es que fue en entrevista para la revista Women's Health que la joven contó su terrible anécdota con la llamada dieta keto, pues aseguró que por años sufrió de dolores de estómago, lo que la hizo acudir a diferentes médicos y nutriólogos que nunca resolvieron su problema, así que decidió poner en práctica esta opción alimenticia.
"Probar diferentes dietas fue una de las formas en las que intenté avanzar. Las probé todas...En enero de 2016, decidí probar la dieta keto por varias razones. Quería mejorar mi rendimiento como corredora y quemar grasa en lugar de azúcar. También esperaba que me ayudara con mi debilitante dolor abdominal y estreñimiento. Además eliminar el azúcar, los lácteos y los cereales es lo que hace la gente sana, ¿no?", indicó.
Sin embargo, Claire nunca se imaginó lo que vendría después de cambiar tan abruptamente su dieta, y que las consecuencias serían casi mortales, pues su cuerpo estaba sufriendo de una enfermedad que empeoró con la forma de alimentarse: la porfiria aguda intermitente.
"Me equivoqué. Nunca podría haber imaginado que unos seis meses después de empezar esta dieta, mi colon se cerraría por completo y me hospitalizarían durante 27 días en el transcurso de 5 meses...Me diagnosticaron porfiria aguda intermitente, una enfermedad genética que afecta a menos de 3.000 estadounidenses...resulta que los carbohidratos en realidad pueden ayudar a mantener los síntomas a raya - que es por eso que hacer la keto llevó a tantos problemas", contó.
A raíz de esto se dio cuenta que "un grupo de alimentos que demonicé durante tanto tiempo es en realidad un componente clave para ayudarme a sentirme mejor".
Finalmente el consejo de Claire Richmond es el de no dejarse llevar por las dietas que aparecen en internet o que se ponen de moda, pues realmente no sabemos cómo está nuestro cuerpo y qué enfermedades pueden dispararse tras hacer esto sin supervisión médica.
"Una de las cosas más sorprendentes que aprendí en mi experiencia: las dietas de moda no siempre son las más saludables. Ah, y que la vida es mucho más divertida con bocadillos", concluyó.