Para un artista la fama puede ser contraproducente, a veces los ciega y los orilla a situaciones que de otra forma no harían. Estar expuesto a miles de ojos, puede ser intimidante y tienen que recurrir a sustancias que los dispersan de la realidad.
Afortunadamente algunas celebridades han podido salir de sus adicciones y aunque es un trabajo arduo de todos los días, son ejemplo para las personas que buscan salir del hoyo.
Uno de los ejemplos más visibles es el de “Dr. Shenka”, vocalista de Panteón Rococó, que a través de sus redes sociales compartió su testimonio y experiencia a un año de sobriedad:
“Hoy hace un año comencé uno de los procesos más maravillosos que me he decidido a vivir. Mi camino a la sobriedad. No ha sido un camino fácil, nada sencillo doblar las manos con humildad y aceptar que estaba en el camino errado; pero debo confesar que pensé sería aún más tortuoso que lo que vivía previo a ella”.
El cantante y compositor reconoció que al principio tuvo miedos, el más grande cómo sería conectar con su público sin evadir la energía que aparece en el escenario y que se aminoraba con alguna sustancia.
“Darme cuenta que vivía evadido de aquello que soy, culpando al mundo de mis tristezas, de mis soledades, de ese desamor que me profesaba hacia mi mismo. Hoy abrazo con tanta paz este cuerpo carnoso en el que habita mi alma y puedo entonces vivir en el aquí y en el ahora, agradecido con todo aquello que contribuye a mi crecimiento como persona, con el espíritu más fortalecido y sobretodo lleno del amor que jamás me permitía recibir, sentir y expresar”, añadió Shenka.
Luego de un año de sobriedad, la vida del músico mexicano ha mejorado: “ Hoy despierto cada mañana sin ansiedad, sin enojos ni frustraciones inventadas en mi cabeza, hoy la claridad esta mas presente que nunca y sobre todo la gratitud de tener esta vida que me tocó, agradecido de ser quien soy. Un ente que habita este cuerpo llamado Luis Román”.