Hemos visto infinidad de acciones extremas de los actores para lograr cumplir con su expectativa de un personaje, desde los que aumentan de peso poniendo en riesgo su salud, hasta aquellos que se van del lado contrario hasta quedar en los huesos, como ahora ha sido el caso del icónico Cillian Murphy para su protagónico en Oppenheimer.
La cinta que ha recibido muy buenas críticas y está próxima a estrenar, llevó al exitoso actor de Peaky Blinders a tomar medidas extremas para interpretar al famoso físico J. Robert Oppenheimer, el cual ayudó a Estados Unidos a desarrollar la bomba atómica en 1945, el cual se dice pesaba 52 kilos y fumaba 100 cigarrillos al día.
Es así como Murphy se lo tomó bastante en serio, llevando una estricta dieta de comer sólo una almendra al día o un pedazo de manzana.
"Me encanta actuar con mi cuerpo, y Oppenheimer tenía un físico y una silueta muy distintos, que quería hacer bien", aseguró en entrevista para The New York Times.
Y esta historia fue confirmada por sus compañeros de escena, Emily Blunt y Matt Damon, quienes aseguraron que durante el rodaje en Nuevo México las cenas eran espectaculares, aunque su compañero nunca se unió a ellos.
"Entrabas y veías a todos, así que todos terminaban sentados juntos...(Cillian comía) una almendra la mayoría de las noches o una pequeña porción de manzana", aseguró Matt en entrevista para People.
Y agregó: "Invitábamos a Cillian a cenar todas las noches, y nunca fue. Estaba perdiendo tanto peso para el papel que simplemente no cenó nunca".
Por su parte Blunt dijo que a pesar de insitirle a su compañero en cenar juntos, él nunca aceptó, terminaba por encerrarse en su camerino para descansar.
"El volumen total de lo que tuvo que asumir y asumir es tan monumental”, dijo Emily. “Por supuesto, no quería venir a cenar con nosotros", a lo que Damon remarcó: "No podía. Su cerebro estaba demasiado lleno".