Luego de los tremendos escándalos que protagonizaron Luis Enrique Guzmán Pinal y su aún esposa Mayela Laguna, es ahora cuando nuevamente han capturado la atención de los medios al revelar que Apolo ¡no es hijo de él!
Fue por medio de un comunicado compartido por Ventaneando que el hijo de Silvia Pinal y Enrique Guzmán explicó que tras una prueba de ADN se confirmó que no hay coincidencia de parentesco con el pequeño de casi 5 años.
"El señor Luis Enrique Guzmán Pinal se realizó una prueba en genética molecular con resultados del cero por ciento de paternidad y compatibilidad a partir del desarrollo y aplicación de esta ciencia geneista, entre el menor de iniciales AAGL y el señor Luis Enrique Guzmán Pinal", se reveló.
Luego de esto se indicó que debido a la situación legalmente el músico ya no tiene ninguna obligación económica con respecto al niño, así que no continuará cumpliendo con esta.
"Si debe quedar muy claro que esta unión o lazo jurídico que tiene su génesis en la filiación, misma que sólo reside entre padres e hijos y constituye un estado civil del que derivan tanto derechos como obligaciones, no es dable (viable) continuarla", se indicó.
Aún así también se destacó que "esto no quiere decir que el afecto del señor Luis Enrique Guzmán Pinal para el menor desaparece, ya que el vínculo que nace desde un cariño de esta magnitud es algo que se lleva en el andar de la vida misma".
Finalmente Luis Enrique Guzmán pidió que se respeten los derechos del niño, se proteja su identidad y que se brinde la oportunidad de conocer su verdadero origen.
"Esto no le pretende negar al menor el afecto y cariño que le pueden brindar su padre y familia biológica, así también el apoyo económico al que están obligados, y finalmente el derecho del menor a conocer su verdadero origen", puntualizaron.
Hasta el momento Mayela Laguna no se ha pronunciado al respecto, pero se espera que pronto lo haga para aclarar la situación, además de lo que pasará con Alejandra Guzmán, quien había heredado grandes propiedades y sumas de dinero al pequeño que consideraba su sobrino. ¡Ufff!