La entrega de los Grammys este 2023 sí que dio mucho de qué hablar, desde la pelea de JLo y Ben Affleck, hasta los discursos y actitudes racistas, o las críticas a los cambios físicos como le pasó a Madonna, y es ella quien ha roto el silencio.
Fueron varios los que cuestionaron que la Reina del Pop luciera tan diferente, que su rostro lucía mal por tanta cirugía estética, y esto sin duda desató su ira, lo que la llevó a escribir un extenso mensaje en redes sociales.
"En lugar de centrarse en lo que dije en mi discurso, que fue de agradecimiento por la valentía de artistas como Sam y Kim, muchas personas optaron por hablar sólo sobre mis fotos en primer plano tomadas con una cámara de lente larga por un fotógrafo que ¡distorsionaría la cara de cualquiera!", señaló.
Y continuó: "Una vez más estoy atrapada por el resplandor de la discriminación por edad y la misoginia que impregnan el mundo en el que vivimos. Un mundo que se niega a celebrar que las mujeres pasen de los 45 años y que siente la necesidad de castigarla si continúa siendo fuerte, trabajadora y aventurera".
La intérprete de Like a Virgin aseguró que nunca se arrepentirá de lo que ha hecho ni de cómo se ve, y que seguirá luchando para dejar las puertas abiertas a las generaciones que vienen.
"Nunca me he disculpado por ninguna de las elecciones creativas que he hecho, ni por la forma en que me veo o me visto y no voy a empezar ahora. He sido degradada por los medios desde el comienzo de mi carrera, pero entiendo que todo esto es una prueba y estoy feliz de ser una pionera para que todas las mujeres detrás de mí puedan tenerlo más fácil en los años venideros. Espero con ganas muchos años más de comportamiento subversivo, empujando los límites, enfrentándome al patriarcado y, sobre todo, disfrutando de mi vida", concluyó.