En una ceremonia llena de emociones y recuerdos, la ciudad de Barranquilla, cuna de la talentosa Shakira, rindió un homenaje sin precedentes a la cantante con la inauguración de una majestuosa estatua de bronce de 6.5 metros de altura. Concebida por el hábil escultor Yino Márquez, esta obra no es solo un testimonio de la destreza artística de Márquez, sino también un reflejo del legado inigualable de Shakira en el mundo de la música.
Ubicada en el emblemático Malecón del Río, donde el río Magdalena se convierte en testigo de la historia y cultura barranquillera, la estatua se erige como un símbolo de la conexión indisoluble entre la cantante y sus raíces caribeñas. Su pose, capturada en pleno baile, evoca la pasión y el ritmo que Shakira ha inyectado en cada una de sus interpretaciones, mientras que su atuendo, que simula las ondulaciones del mar, rinde tributo al espíritu libre y enérgico que la artista ha llevado al escenario global.
Para Shakira, este reconocimiento va más allá de una simple estatua; es un testimonio del amor y apoyo de su ciudad natal. En un momento particularmente conmovedor durante la ceremonia, Shakira, con lágrimas en los ojos, expresó su gratitud por poder compartir este honor con su madre, cuyo cumpleaños coincidió con la inauguración. La presencia de sus padres, William Mebarak y Nidia Ripoll, subrayó el vínculo familiar y el orgullo compartido.
La alcaldía de Barranquilla, consciente del potencial turístico y cultural de esta estatua, espera que se convierta en un punto de referencia para visitantes y locales por igual. Con la incorporación de esta escultura monumental, Barranquilla no solo celebra la trayectoria musical de Shakira sino también su compromiso incansable con la educación y el bienestar de los niños del Atlántico y toda la región Caribe.
La estatua de bronce de Shakira en el Malecón del Río no es solo una pieza de arte; es un testimonio del cariño, admiración y respeto de Barranquilla hacia una de sus más grandes embajadoras en el mundo. Es un recordatorio permanente de que, a través del talento, la pasión y el compromiso, es posible dejar una huella indeleble en la historia y en el corazón de las personas.