Fue el pasado 28 de octubre cuando el mundo del espectáculo y la televisión perdió a uno de sus grandes ídolos, Matthew Perry, provocando que su repentina muerte estuviera ligada a las adicciones que toda su vida lo atormentaron, pero ¿es verdad?
Los primeros reportes de la autopsia del protagonista de Friends indicaron que fue la ketamina, un medicamento para la depresión, lo que hizo que muriera, pues había una sobreestimulación en su sistema cardiovascular producto de esta sustancia.
Pero ¿qué otras se encontraron en el reporte forense?
Fue la revista Elsevier la encargada de dar a conocer esta información, que si bien muchos se han cuestionado sobre la depresión de Perry, otros más han intuido que los opioides estaban presentes.
Y no necesariamente lo conocido como “drogas duras”, pero sí se encontró una fuerte cantidad de nicotina, algo equivalente a dos cajetillas de cigarrillos al día.
Además de inyecciones de testosterona, medicamentos antidiabéticos y para bajar de peso.
Cabe destacar que no hubo nada de alcohol, metanfetamina, cocaína, heroína, fenciclidina (PCP) o fentanilo. Aunque también se reveló que había Buprenorfina, un medicamento que se usa para ayudar a terminar con las adicciones, lo que indica que seguía luchando para no recaer. Terrible.