El actor Leonardo Daniel reveló en una entrevista con Matilde Obregón cómo fue el engorroso proceso de adoptar a su pequeña luego de tener dos hijos con su esposa Lilan Davis con quien se plantó la promesa de unir otro integrante a su familia.
En la charla con la periodista, el histrión de telenovelas como “Cañaveral de pasiones” o “Cuando seas mía” recordó que su esposa y él intentaron adoptar a un pequeño del Tíbet, pero se enfrentaron a estrictas reglas para su adopción, así que mejor se decidieron por un menor de origen mexicano.
Desafortunadamente el artista y su mujer, que ya radicaban en Estados Unidos, también se enfrentaron a los pesados trámites para adoptar a un pequeño a través del DIF, y en medio de su lucha por conseguirlo, Leonardo Daniel asegura que una alta autoridad de dicha institución de aquel entonces le dio un triste y fuerte consejo.
"No pudimos. No te voy a decir quién, pero el último consejo de una alta autoridad de las adopciones (aquí en México) nos dijo: "miren, no se compliquen la vida. Váyanse a Monterrey y cómprense un niño en un convento", reveló.
"En aquel entonces, para no meterme en broncas, las niñas bien en Monterrey se embarazaban, iban a los conventos, tenían a su niño y ahí lo dejaban. Entonces tú ibas y les decías: 'oiga, ¿no tendrá de casualidad a alguien que le haya dejado una canasta con un niño?'. Y sí tenían", prosiguió.
El intérprete y su esposa no vieron como una opción el consejo del funcionario ya que podrían ser acusados de tráfico humano y de órganos. Así que gracias al cantante Carlos Ponce, los puso en contacto con la agencia de adopción que él usó en Estados Unidos, así que todo salió a pedir de boca aunque la pequeña que los esperaba se encontraba en Rusia.
"Recibió la llamada para informarle que debían viajar lo más pronto posible a Rusia: (Nos dijeron que) hay una niña de cuatro años y medio que perdió el juicio de adopción. Ah, porque tienes que hacer un juicio. Si no es alguien que ya tiene los papeles para que pueda entrar a Estados Unidos, no la van a adoptar nunca. (...) Mi mujer y yo dijimos: 'Por algo son las cosas'".
Fue así que Lian se unió a la familia del actor, actualmente estudia la universidad y es fanática de la literatura y sin duda, el más grande orgullo de su famoso padre.