Las celebridades se enfrentan diariamente a un sinfín de críticas a través de redes sociales, y es que sin razón aparente, algunos internautas deciden tirar “hate” simplemente por hobby.
Por otro lado, estrellas con gran nivel de convocatoria deben tener mucho cuidado con lo que expresan, de lo contrario la factura les saldrá cara e incluso su carrera podría apagarse.
Lo anterior es una de las lecciones que Selena Gomez ha aprendido a la mala, y como ejemplo, la más reciente polémica que desató con sus publicaciones sobre el conflicto entre Israel y Palestina.
En medio de la lluvia de críticas que recibió la cantante y actriz, Selena se mostró desanimada y harta de la situación a la que se expone por el simple hecho de ser una figura pública y externar lo que piensa.
Esto la llevó a querer cerrar una de sus redes sociales: “Me tomaré un descanso y borraré mi Instagram. Estoy harta. No apoyo nada de lo que está pasando”.
Selena recibió fuertes críticas por opinar sobre la tensa situación en Medio Oriente, esto a pesar de que no fijo una postura:
“La gente siendo torturada y asesinada o cualquier acto de odio hacia cualquier grupo, es horrible. Necesitamos proteger a TODAS las personas, especialmente a los niños, y detener la violencia para siempre”.