Messi es uno de los futbolistas más importantes de la historia y aunque sus hazañas en la cancha son inolvidables, lo que hace cuando no hay un balón de por medio, también es de trascendencia.
Como capitán de la Selección Argentina, Lionel tiene el carácter suficiente para echarse el equipo al hombro, incluso en situaciones que no tengan que ver directamente con el fútbol.
Tal y como sucedió este martes 21 durante el encuentro disputados por los seleccionados de Brasil y Argentina, donde la policía del estadio Maracaná agredió con exceso de violencia a los aficionados argentinos.
Al percatarse de tal atrocidad, jugadores de la albiceleste, incluyendo a Messi, se acercaron a las gradas donde ocurrieron los hechos para tratar de calmar los ánimos.
Fue tal el enojo e indignación del jugador del Inter Miami, que decidió salir del campo hasta que dejaran de actuar en contra de sus connacionales. El capitán fue seguido por su equipo, demostrando el peso que el astro argentino tiene en su selección.