Una fuerte polémica se desató en redes este martes, luego de que el actor hollywoodense Sylvester Stallone apareciera con un nuevo tatuaje que levantó sospechas de un posible divorcio. ¿Por?, resulta que el nuevo trazo era en realidad un viejo tatuaje que hacía honor a Jennifer Flavin, la esposa del intérprete.
El actor tomó la decisión de reemplazar el tatuaje de su esposa, Jennifer Flavin, con un nuevo diseño que representa al famoso perro de su mítico personaje Rocky Balboa, Butkus.
El revuelo generado fue tal que un portavoz del intérprete ha tenido que salir a la palestra con un escueto comunicado para aclarar las circunstancias de lo sucedido y explicar que la convivencia entre los dos enamorados no se ha visto perjudicada por la decisión del actor.
"El señor Stallone quería renovar el tatuaje de su esposa Jennifer, pero desgraciadamente los resultados no fueron satisfactorios y no pudo arreglarse. En consecuencia, tuvo que cubrir la imagen original con un tatuaje de su perro en 'Rocky', Butkus", ha señalado el representante del también protagonista de 'Scarface' o la saga 'Rambo' en una nota compartida por el diario británico Daily Mail.