Las recientes declaraciones de la actriz Drew Barrymore están resonando con fuerza en Hollywood, y es que la también presentadora puso sobre la mesa un tema bastante controversial, en el que de paso, dio detalles de su vida íntima y confesó que no ha tenido relaciones íntimas desde que se divorció, en 2016.
“Desde que me separé no he podido tener una relación íntima. He tenido el honor y el placer de trabajar en mí misma y aprender qué es la crianza de los hijos”, compartió. “Estoy en un lugar completamente diferente de mi vida y, tal vez, en un futuro cercano tenga una relación. Pero simplemente no ha sido mi prioridad”.
Como era de esperarse, las declaraciones de inmediato crearon reacciones de todo tipo, por lo que la actriz decidió ahondar en el tema y compartió una entrada en su blog, donde habla más acerca de sus razones.
"Algunas personas pueden salir de un matrimonio o una relación y en un futuro cercano encontrarse en otra relación. ¡No hay nada de malo en eso! Ni un poco. ¡No juzgo! ¡Celebro su viaje! Porque para algunas personas eso realmente funciona. No funcionó para mí”, expresó la actriz
Barrymore no especificó si se identifica como asexual debido a su desinteres por encuentros íntimos, pero hizo hincapié en que el estar en un estado de celibato era una forma de ‘honrar un estado de luto’ por la pérdida de su núcleo familiar.
“¿Cuándo creces y estás en un matrimonio con hijos y piensas que solo estarás con esa persona por el resto de tu vida y eso no sucede? Me sacudió hasta la médula, por decirlo suavemente”, añadió.
Drew explicó que no necesita de encuentros íntimos porque está completamente volcada en sus actividades profesionales y como mamá.
“No soy una persona que necesita sexo y tiene que salir y relacionarse con personas de ese nivel. Soy alguien que está profundamente comprometida con fomentar cómo se supone que las niñas, mis hijas y yo misma como mujer debemos funcionar en este mundo”.
Barrymore y Kopelman se divorciaron en 2016 después de cuatro años de casados y de haber tenido dos hijas: Olive, de 10 años, y Frankie, de 8.