¡Ufff! Las cosas para James Corden no pintan nada bien tras tremendo "quemón" que le metió el dueño del lujoso restaurante Balthazar en Nueva York.
Y es que Keith McNally utilizó su Instagram para dar a conocer que el famoso conductor de Carpool Karaoke era grosero con el personal, "un cliente tirano" y había decidido darle un 86, es decir vetarlo de su restaurante.
"James Corden es un comediante enormemente dotado, pero como persona es un cretino. Y el cliente más tirano que ha tenido el equipo de Balthazar desde que el restaurante abrió hace 25 años", escribió.
Y agregó: "No suelo ponerle 86 a un cliente [una antigua denominación gastronómica en Estados Unidos para referirse a alguien que tiene vetado el ingreso a un restaurante], pero hoy le he puesto 86 a Corden. No fue gracioso".
Los comentarios comenzaron a llegar eb apoyo del también crítico gastronómico, asegurando que hacía bien por apoyar a su personal con los que los incidentes groseros habían ocurrido.
Pero para sorpresa de muchos James Corden se disculpó de inmediato, según reportó McNally en otro posteo: "Corden acaba de llamarme y se ha disculpado profusamente…Cualquier persona lo suficientemente magnánima como para disculparse con un vago como yo (y mi personal) no merece ser expulsada de ningún sitio".
Pero a pesar de esto las críticas no han parado contra el famoso comediante que sin duda cargará por algún tiempo con esta mala imagen. ¡Zas!