El actor Benedict Cumberbatch, reconocido por dar vida a Dr. Strange en el universo Marvel, recientemente vivió un momento complicado pues reconoció que su salud pudo verse afectada tras su último papel en el cine.
Y es que para la película ‘Power of Dog', Cumberbatch tuvo que adoptar el hábito de fumar para acoplarse a la vida de un adicto al tabaco, pues en la la mencionada cinta, el intérprete de 'Sherlock' da vida a Phil Burbank, un fumador empedernido que casi nunca dejaba de inhalar y expulsar humo de su boca al tiempo que administraba su rancho de Montana.
El actor reveló que incluso que llegó a "intoxicarse" con el exceso de nicotina hasta en tres ocasiones, por lo que ha calificado su experiencia en el set de rodaje de "horrible" al menos en lo que al plano de la figuración se refiere.
"Lo de fumar fue realmente duro. Tenía que enrollar cigarrillos sin filtro toma tras toma. Me intoxiqué tres veces por el consumo de nicotina. Cuando tienes que fumar tanto, es verdaderamente horrible", dijo Cumberbatch en conversación con la edición británica de la revista Esquire.
"Pero quería tener esa capa de mal olor sobre mí, y no solo en los ensayos. Salía a comer con Jane [Champion, la guionista y directora de la película] y sus amigos y hacía cosas por el estilo", añadió.